jueves, 22 de agosto de 2019

Cosas de botánica

Yo creo que lo de la memoria de pez es un don porque, cuando das la vuelta a una hoja, ya no te acuerdas del envés. Si hay algún signo de enfermedad, no la sientes y no piensas mucho en ello. A veces ni padeces el virus que acompañan. Todo es psicología ¿no?

Pero la realidad es que, al menos yo, sí que tengo buena memoria. Recuerdo el recorrido perfectamente, desde la primera raíz al tallo y luego, hasta las hojas y las flores. Y qué curioso es ver que cada síntoma se convierte poco a poco en una enfermedad, mucho peor cuanto más crecen los tramos y se atisban nuevas rutas. Lo que era verde se está volviendo más bien marrón.

 Las flores casi no se pueden sostener solas.
Se pudren.

2 comentarios:

  1. solo se pudren las flores que se cortan!, las que se quedan les gustaría recordar, porque suelen convertirse en algo mas!!

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