Creo que hay unos minutos en nuestra vida, en los que las personas buenas nos merecemos poder ser malos. Odiar sin tapujos, tener celos, enfadarnos por injusticias, romper cosas y desear lo peor y, después, volver al cauce de la bondad. Porque oye, a veces ser de este bando es bastante complicado. A veces tanta paciencia pasa factura... Y el mundo es muy jodido de aguantar, sinceramente.
Sí, pero dejarías de ser tú... precisamente es eso lo que te hace tan especial, y no un Charles Bronson cualquiera (Yo, soy la Justicia... El justiciero de la ciudad etc) Ya sé que algunas veces es una mierda no poder ser de otra manera por un ratito. Pero tú eres diferente. Eres mejor.
ResponderEliminar¿Las personas buenas no pueden enfadarse, odiar a alguien, estar celosas, etc.? ¿Eso las convierte en malas? No, eso las convierte en humanas Alba. No somos robots, y sentir estas cosas es completamente normal. Cómo reacciones ante ellas (de una manera pasiva, comprensiva, violenta o dañina) es lo que te define como una persona buena o mala
ResponderEliminarjaja estoy de acuerdo contigo Alava.
ResponderEliminarPor casualidad entre a tu blog y encontre justo la reflexión que necesitaba leer, en serio eres genial. Saludos y como dice tú, larga vida al rock y al metal.
¿Qué es bueno y qué es malo? Una cosa no existiría sin la otra...
ResponderEliminarSi... justo eso pienso? Es gracioso que digo eso. A esa faceta la he denominado "black reaper" que sale cuando debo tomar decidiones fuertes. Pero ya, después de haber desahogado esa faceta... se vuelve a ser un buen sujeto ^^.
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