De niño tomaba un espejo grande y lo ponía a la altura de mi cadera reflejando el techo. Viendo el techo de mi casa en el espejo, empezaba a caminar y por un momento sentía como si estuviera caminando bajo el tejado con todo el mundo de cabeza....
De lo que cuelgas no existe.
Te hundes bajo la aurora que muestra sobre sus montes el cielo por el que mágicamente hay que volar.
De niño tomaba un espejo grande y lo ponía a la altura de mi cadera reflejando el techo. Viendo el techo de mi casa en el espejo, empezaba a caminar y por un momento sentía como si estuviera caminando bajo el tejado con todo el mundo de cabeza....
ResponderEliminarDe lo que cuelgas no existe.
Te hundes bajo la aurora que muestra sobre sus montes
el cielo por el que mágicamente hay que volar.